Pastel fondant vs Pastel tradicional
Elegir el pastel perfecto para tu cumpleaños, boda, graduación, aniversario, etc. se ha convertido en una de las labores más complicadas. Y es que conforme pasa el tiempo, tenemos más y más opciones; Dónde comprarlo, cuánto queremos invertir, de qué tamaño tiene que ser, si necesita un diseño especial o no, si solo queremos espacio para poner las velitas…. ¡Qué dilema!
No lo puedes negar, alguna vez te has encontrado o te encontrarás en este punto. Para ayudarte, te compartiremos algunas ventajas y desventajas de dos de los pasteles más codiciados.
Fondant vs Tradicional
Los pasteles fondant ya tienen un tiempo arrasando con sus interminables diseños, tan asombrosos que resulta casi un crimen comérselos. Los detalles pueden ser sumamente finos, el acabado increíblemente uniforme, la variedad de colores interminable. Puedes echar a volar tu imaginación, ¡Excepto con los ingredientes! Lamentablemente no siempre puedes tener tu pastel favorito con fondant, la consistencia debe ser muy específica. Así que si eres fan del pastel de tres leches, olvídalo. Otra desventaja es el precio, al ser pasteles mucho más elaborados y en la mayoría de las ocasiones, bajo pedido, el costo es más elevado. Además, el fondant está hecho a base de azúcar, y aunque si se le puede dar un toque de sabor, es un recubrimiento bastante dulce.
Ni modo, ¡La belleza cuesta!
Mientras tanto, los pasteles tradicionales no han pasado ni pasarán de moda. A todos nos encanta el típico pastel que probamos en la mayoría de los eventos especiales.
En cuanto al sabor existen de muchísimas variedades, y se pueden ajustar a tu antojo; choco-flan, tres leches, envinados, con mousse de chocolate, de zanahoria, con mermelada… y todo lo que se te ocurra. Y qué decir de los betunes, hay miles y puedes agregar fruta fresca, fruta seca, nueces, almendras, cerezas…
A pesar de ser pasteles tradicionales, pueden tener diseños súper innovadores. Algunos betunes se colocan de formas tan artísticas parecerían falsos, también existen impresiones en oblea que se colocan al final y pueden contener cualquier imagen o fotografía. Y lo mejor, el precio, esta opción resulta mucho más económica; aunque como todo, hay niveles. Y claro, es inevitable realizar algunas esculturas con la receta tradicional, pero al final, lo más importante es que lo disfrute tu paladar. ¿Cierto?
¿Y tú? Eres de las que prefieren que el pastel sepa súper rico o que parezca obra de arte…?